Como cada 14 de septiembre, el regreso de la Virgen de las Maravillas a su camarín en el Santuario franciscano de San Esteban y el estruendo del trueno gordo han puesto fin en Cehegín a una intensa semana festiva en la que el tiempo ha respetado todos los actos previstos. El tramo final de las fiestas ha coincidido en fin de semana y esto ha hecho que la presencia de personas en las calles se haya incrementado.
El concierto de Fito & Fitipaldis en la Plaza de Toros la noche del día 13 fue seguido por miles de personas llegadas desde muchos puntos de la Región de Murcia, que disfrutaron con la buena música de esta mítica banda que interpretó magistralmente sus principales temas.
Al día siguiente se celebró la misa en la parroquia de Santa María Magdalena cantada por el Coro Clásico de Cehegín, dirigido por Francisco Peñalver. Durante la misa, a la que asistieron los alcaldes de Mataró y Premiá de Mar acompañados por el de Cehegín, la Hermandad de la Virgen de las Maravillas entregó al sacerdote José Martínez, que ha estado en la localidad unas tres décadas, el nombramiento de Hermano de Honor de esta cofradía.
Finalizada la misa, el alcalde de Cehegín, José Soria, recibió a los alcaldes de Mataró, Joan Mora, y Premiá de Mar, Miquel Buch, en el Ayuntamiento, donde hubo un intercambio de regalos y donde se estrecharon los lazos de unión existentes entre las tres ciudades.
Por la noche, la imagen de la Patrona fue trasladada en procesión hasta su Santuario. La banda de cornetas y tambores de la cofradía del Santo Sepulcro abrió la cabeza de la procesión, en la que también participaron representantes de todas las cofradías de Semana Santa, la junta directiva de la Hermandad de la Virgen de las Maravillas con Aurelio Ruiz a la cabeza, el guardián del convento de San Esteban, sacerdotes y frailes franciscanos y la Corporación municipal, con el alcalde José Soria y sus homónimos catalanes como invitados.
